En el vientre del tiempo
Nací desplazada
con el muxu’x perdido
entre el llanto y grito de mi madre
en la angustia de mi padre
Nací desplazada
con el muxu’x perdido
entre el llanto y grito de mi madre
en la angustia de mi padre
Sudando en la humedad de junio,
percibo mi respiración al filo de dormirme
hasta que no siento mi rostro ni mis manos.
Estaba harto de la muerte,
y por aquellos días
en todas partes era el fin de los tiempos:
se desprendían los maniquíes de los escaparates,
la vida era un derrumbe.
«No te olvides de las panteras de mi nombre de mis ramas lumínicas y mi canto de caracolas azules Ellas cruzan toda frontera».
Leer más Post-it Notes«Una ciudad que no canta es efímera,
es amarga,
y muere cada treinta segundos».